El papel de aluminio es un tipo de material que fabricado principalmente a partir de laminación de una lámina de aluminio. Su uso está relacionado con el envasado de productos alimenticios, como galletas, carne, pescado y refrescos.
Durante el proceso de fabricación, el aluminio se funde a 1600 °C, luego se muelen en pequeñas particulas que se colocan junto a otros materiales si fuese necesario y se vuelven a fundir.
Luego, la masa moldeada se compacta, explotando el aire en su interior, lo que produce pequeñas burbujas y reduce las dimensiones del material para facilitar el paso hacia las siguientes etapas.
En primer lugar, el material se empuja a través de rodillos a altas presiones, hasta obtener de forma continua un lámina acabada que llegará luego a un último rodillo passandose le unta una capa gelatinosa, para finalmente ser refrigerada.
En la segunda etapa también hay un proceso de laminación que consiste en pasar la lámina de metal, dos o tres veces, entre varios rodillos de metal para reducir su grosor. Una capa adicional de material polimérico es aplicada sobre la lámina para protegerla y envolverla, con un recubrimiento antioxidante.
Posteriormente llegamos al proceso de corte mediante tijeras, prensas mecánicas o potencia laser. Esta etapa finaliza con la aplicación de una laca para interior y exterior para mejorar su características de resistencia y durabilidad. Finalmente, se realiza el embalado y envío del material.
El uso del papel de aluminio ofrece una gran variedad de beneficios que hacen de él un material altamente funcional y de gran utilidad:
Estas características lo hacen un gran material de embalaje y para diversas aplicaciones. Entre ellas, almacenamiento de alimentos, envoltorio de productos y protección de equipos electrónicos.
Más allá de los beneficios que ofrece el aluminio como material aislante y reciclable, el uso de este recurso en empaques ofrece una serie de ventajas competitivas a quienes lo utilizan:
El proceso industrial para fabricar el papel de aluminio es relativamente sencillo en comparación con el proceso para fabricar otros materiales. Ademas, ofrece numerosas ventajas en cuanto a su versatilidad, durabilidad y respaldo ecológico, además de ser una excelente forma de proteger los alimentos.
Todo esto lo hace un aliado importante para aquellas empresas que necesitan empaques seguros para sus productos, aunque también debe recordarse que estos materiales pueden contaminar el medio ambiente por su composición. Por ello, es recomendable, siempre que sea posible, optar por bolsas biodegradables y otros materiales alternativos para asegurar el cuidado del medio ambiente.
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